Con estos cinco trucos, suerte y un poquito de sentido común conseguirás convertirte en el amo de PUBG. Recuerda que, en última instancia, PUBG es un juego de estrategia. Si no tienes una bien definida no vas a llegar muy lejos, ¡así que piensa dos veces cualquier cosa que vayas a hacer!

• No te fíes de nadie: estás solo. Cualquier persona que quiera ayudarte acabará matándote tarde o temprano, así que no te fíes de buenos samaritanos que te ofrezcan ayuda y apoyo. Una estrategia inteligente es decirles que sí, que os ayudáis, y cuando se descuide, matarlo. Un enemigo menos.

• Apunta, dispara y no te muevas: las pistolas y rifles se mueven muchísimo, y son difíciles de controlar en pantallas móviles. Cuando estés en un tiroteo a media y larga distancia, apunta, dispara e intenta no moverte. Así darás más balas. Si el combate es a corta distancia, no apuntes, ve a bocajarro.

• Evita las casas con puertas abiertas: si una casa está abierta, desconfía. Posiblemente ya no haya ningún loot interesante o, peor aun, haya alguien esperando detrás de una esquina. Pasa de largo, mejor prevenir que empezar partida de nuevo.

• No corras como un loco: muévete de forma inteligente, entre las casas y buscando coberturas. Correr por una pradera como si estuvieses entrenando en un suicidio, y te convierte en carne de francotirador. Corre solo cuando la situación lo exija. Recuerda, el sigilo es tu mejor amigo.

• Piensa bien el salto: si saltas en zonas pobladas habrá más loot, más gente y más posibilidades de morir. Lo mejor es que saltes en zonas pequeñas o medias, te equipes un poco y luego te vayas moviendo hacia zonas más grandes. ¡Y no saltes cuando salten todos! Paciencia, piensa bien hacia donde van los demás y no saltes hacia allí.